sábado, 23 de abril de 2011

POESIA INDIGENA COLOMBIANA

Literatura Indígena

La voz indígena, pobladora original de lo que hoy es Colombia, es paradójicamente la que menos sobrevive. La violencia de los conquistadores y sus esfuerzos por imponer sus costumbres causaron la pérdida de textos legendarios. Algunos de los textos sobrevivientes:
Leyenda de Yurupary. Narración de origen amazónico, escrita por el indio José Roberto y traducida al italiano por el conde Ermanno Stradelli. Yurupary es un héroe mítico, conocido en Brasil y Colombia.
 
YURUPARY

La Leyenda de Yuruparý[2] era de común conocimiento en las tribus del AmazonasRío Vaupés, habiendo sido transmitida de manera oral. colombiano-brasileño, especialmente en la cuenca del
A finales del siglo XIX, el indio brasileño Maximiano José Roberto escribió una versión en lengua ñe'engatú con caracteres latinos. Dicha versión se perdió y sólo quedó la versión italiana que de dicho texto hizo Ermanno Stradelli, publicada en el boletín de la Sociedad Geográfica Italiana en 1890 bajo el título de Leggenda dell’ Jurupary. Hay quienes dicen que Stradelli es quien debe llevarse el crédito por la composición del texto, y que Roberto es tan sólo un colaborador que le dio al conde un esbozo escrito de la leyenda en su puño y letra. Pero según lo anota Robin Michael Wright (1981), se puede concluir que lo que hicieron Stradelli y Roberto fue una investigación en equipo:
“De uno y de otro, confrontando y ordenando las diversas narraciones y sometiéndolas a las críticas de los varios indígenas reunidos, para poder estar seguro ahora de presentar esta leyenda indígena”
Stradelli afirma que este acto es
“un trabajo destinado a modificar profundamente todo aquello que se conoce sobre estos indígenas y a aportar una inmensa luz sobre su proveniencia”
Roberto le dio el texto, luego lo confrontaron con indígenas de la zona, miembros de diferentes tribus, y así fueron articulando las frases de la leyenda, como Stradelli mismo dijo, hasta tenerla terminada y traducida al italiano.
A pesar de existir dicha versión, el texto pasó desapercibido por mucho tiempo tanto para brasileños como para colombianos. Sólo fue hasta la década de los cincuenta cuando Don Pastor Restrepo Lince lo tradujo, con la ayuda de Américo Carnicelli, del italiano al español. Javier Arango Ferrer fue el primero en divulgar el texto en su ensayo Raíz y Desarrollo de la Literatura Colombiana.[3]
La versión italiana fue reproducida de nuevo en São Paulo en 1964 como La leyenda del Yuruparý en otras leyendas amazónicas.
La versión que más se conoce actualmente es la de Héctor Orjuela, traducida al español por Susana N. Salessi, publicada en 1983 por el Instituto Caro y Cuervo.
 

Historia del Popol-Vuh

Se desconoce la existencia de una versión original del Popol Vuh. Según Delia Goetz:
"Deberíamos suponer que sería un libro de pinturas con jeroglíficos que los sacerdotes interpretaban al pueblo para mantener vivo el conocimiento del origen de su raza y los misterios de su religión."
Según Fray Francisco Ximénez la primera versión escrita fue elaborada en lengua quiché, utilizando caracteres del alfabeto latino, a mediados del siglo XVI. Según él dicha versión permaneció oculta hasta 1701, cuando los mayas quiché de la comunidad de Santo Tomás Chuilá (hoy Chichicastenango, Guatemala) le mostraron la recopilación de sus historias y mitología.
Se desconoce el nombre del autor de esta primera versión pero Fray Francisco Ximénez, al notar la importancia del documento, decidió traducir el texto al idioma español, asegurando la fidelidad del escrito. Su versión está estructurada en 2 columnas, en una estaba la versión quiché; y en la otra la traducción de Ximénez. La primera versión fue una traducción demasiado literal y resultó muy confusa y oscura. Luego escribió una segunda versión menos literal que incluyó en su "Historia de la Provincia de Santo Vicente de Chiapa y Guatemala" que terminó en 1722.
Los trabajos de Ximénez permanecieron archivados en el Convento de Santo Domingo hasta 1830 cuando fueron trasladados a la Universidad de San Carlos de Guatemala. En 1854Charles Scherzer, quien en 1857 la publicó en Viena fueron encontrados por el austriaco Dr. bajo el título primitivo "Las Historias del origen de los indios de esta provincia de Guatemala".
El sacerdote y misionero Charles Étienne Brasseur de Bourbourg sustrajo el escrito original de la universidad, lo llevó a Europa y lo tradujo al francés. En 1861 publicó un volumen bajo el título de "Popol Vuh, Le livre Sacré et les mythes de l'antiquité Américaine". Él fue quién le dio el nombre.
El libro original fue vendido al coleccionista Alfonso Pinart, más tarde su viuda lo vendió a su vez al etnólogo Otto Stoll, posteriormente fue comprado por Edward E. Ayer, quién lo devolvió a América. Actualmente la primera traducción de Ximénez al castellano y su "Manuscrito de Chichicastenango" se encuentran en la Biblioteca Newberry, en Chicago, Estados Unidos El facsimilar del manuscrito está disponible en la edición en línea hecha en colaboración por la Biblioteca Newberry y las Biblioteca de la Universidad Estatal de Ohio, en un proyecto dirigido por el Dr. Carlos M. López. El facsimilar también está accesible desde el sitio Archivos del Popol Wuj y las culturas mayas en el que además se incluyen documentos y materiales relacionados al manuscrito.
La localidad de Santa Cruz del Quiché, fue fundada por los españoles que sustituyeron a Q’umar Ka’aj, la capital del reino k’iche’. Juan de Rojas y Juan Cortés, aparecen citados en el libro como los últimos integrantes de la generación de los reyes k'iche'